Yahoo Finanzas La verdadera conexión entre Trump y Rusia
Por qué el presidente Trump parece tener tanto afecto por Rusia y su poderoso líder, Vladimir Putin?
Hemos preguntado a Michael Isikoff de Yahoo News, coautor del nuevo superventas, “Russian Roulette: The Inside Story of Putin’s War on America and the Election of Donald Trump” (Ruleta rusa: la trama interna de la guerra de Putin en Estados Unidos y la elección de Donald Trump), y puede que la respuesta sea bastante sencilla: negocios.
“Todo el mundo sigue buscando el arma humeante, la evidencia infalible que explique los problemas de Trump con Rusia”, dice Isikoff a Yahoo Finance. “Pero esa evidencia está a plena vista”.
Como promotor inmobiliario y jefe de la Organización Trump, Trump intentó durante años construir una Torre Trump en Moscú, al igual que lo hizo en Nueva York, Chicago, Vancouver, Estambul y otras grandes ciudades. Allá por 2014, en realidad estaba cerca de lograrlo. Trump estableció los vínculos adecuados durante un viaje a Moscú en 2013, donde se celebró el certamen Miss Universo, que es propiedad suya. Sabía que, para construir la torre, era necesaria la aprobación personal de Putin. Y a principios de 2014, su empresa firmó una carta con las autoridades de Moscú en la que ambas partes se comprometían a seguir adelante con el proyecto.
Ivanka, la hija de Trump, que por entonces era una de las ejecutivas de mayor nivel de la empresa, estuvo en Rusia en febrero de ese año para buscar la ubicación, momento en el que Rusia, por orden directa de Putin, anexionó Crimea. Luego las tropas rusas invadieron Ucrania. Europa y los Estados Unidos respondieron imponiendo nuevas sanciones económicas a Rusia que afectaron directamente a un banco ruso que se había ofrecido para financiar la torre de Trump en Moscú.
“Lo que acabó con su acuerdo en Rusia fueron las sanciones”, dice Isikoff. “Eso explica muchas cosas”.
Cuando Trump era candidato, criticó esas sanciones, aunque no mencionó que afectaban directamente a sus negocios. Y ya como presidente, ha sido extrañamente atento con Putin, lo cual ha contrariado a la mayor parte de la clase dirigente en el ámbito de seguridad nacional y a la más ortodoxa de su propio Partido Republicano. Un ejemplo: Trump llamó a Putin recientemente para felicitarlo por su victoria en unas “elecciones” que para mucha gente han sido amañadas. Los propios asesores de seguridad nacional de Trump, le aconsejaron que no felicitara a Putin.
Trump persistió en su intento de conseguir el acuerdo con Moscú, incluso después de haber presentado su candidatura a presidente en 2015. A finales de ese año, el abogado de Trump, Michael Cohen ‒ahora involucrado en la polémica de Stormy Daniels‒ fue la punta de lanza en otro intento de construir una torre Trump en Moscú.
“El público no sabía nada de todo eso”, dice Isikoff. Este proyecto nunca terminó de despegar, tampoco este.
Mientras buscaban hacer negocios en Moscú, Trump y su empresa ‒incluidos miembros de su familia‒ hicieron un buen número de contactos rusos que se le volvieron en contra cuando este se convirtió en candidato. Esos fueron los rusos que ofrecieron “ensuciar” la figura de Hillary Clinton, o que ayudaron a organizar reuniones para tratar el tema. Algunos son conocidos confidentes de Putin. “Si quieres saber lo que pasó en esas reuniones”, dice Isikoff, “tienes que comprender estas relaciones comerciales”.
El fiscal especial Robert Mueller investiga actualmente si alguno de los acuerdos entre la gente de Trump y la gente de Putin pudiera haber infringido la ley. Trump sigue sin su torre en Moscú, y no existen evidencias públicas de que haya hecho algo ilegal, pero Trump tiene un problema inminente con Mueller, quien podría saber mucho más de lo que ha revelado. Las ambiciones de Trump en el mundo de los negocios han dejado una larga sombra tras de sí.
Video: La relación entre Trump y Putin (en inglés)
